miércoles, 21 de marzo de 2012

Nieva en primavera

Día 20 de marzo. Comienza la primavera. Después de una semana en la que las temperaturas alcanzaron los veinticinco grados vuelve el frío. Ahora toca sacar de nuevo la ropa de invierno que estábamos a punto de guardar en el altillo del armario.

Día 21 de marzo. Parecía que por fin iba a llover, era necesario. Pero no sólo llueve, sino que Madrid ha amanecido cubierta de blanco. Hoy si que si, botas de agua al canto.

Esto se está convirtiendo en el mundo al revés. La última semana de invierno brillaba el sol con todo su esplendor, mientras comenzábamos a pensar nuevos modelitos primaverales, y la primera semana de primavera nieva, toca volver a rescatar la ropa de invierno.

“¡Qué paren el mundo que me quiero bajar!”, relataba Mafalda. ¿Por qué todo ocurre al contrario?, me pregunto yo. La respuesta que se me viene a la cabeza es la más simple: “El mundo se ha vuelto loco”.

Los trabajadores y parados votan al Partido Popular confiando en que así saldremos de la crisis, se juzga y condena a inocentes y se deja en libertad a ladrones, los derechos ahora son de los políticos y no de los ciudadanos, las madres pierden el derecho a decidir sobre su propio cuerpo y hay que empezar a pagar por la sanidad.

Además, con la nueva reforma laboral el trabajador queda totalmente desprotegido. Bueno, aunque si nos paramos a pensarlo esto es normal. El gobierno y por ente, la reforma laboral, beneficia al empresario. ¡Buf, menos mal! Por una parte me quedo tranquila. Si el PP sigue mirando por el empresario es que no todo está al revés. Si el partido de Mariano Rajoy hubiera intentado beneficiar a los ciudadanos ya sería para preocuparse… ¡Eso sí sería el mundo al revés!

Parece que hay cosas que no cambian. Ni el tiempo, ni los hechos, ni las circunstancias cambian las ideas. Pero bueno, menos mal que por lo menos es bonito ver nevar en primavera.

domingo, 18 de marzo de 2012

Susurros al oído

Una vez una amiga me contó…

“El otro día iba paseando por la calle, escuchaba música y de pronto me puse a pensar en él. No sé por qué, me llamarás loca, pero estuve pensando en el día de nuestra boda.

Me imaginé vestida de blanco, dirigiéndome hacia él mientras veía como se iluminaba su cara con una enorme sonrisa. Me daba un beso, a pesar de que según el protocolo era mejor no hacerlo hasta el final del acto y me decía: “Estás preciosa”.

Por un momento pensé que estaba totalmente loca. ¡Cómo podía ponerme a pensar en eso! Pero continué, empecé a recordar momentos que he hemos pasado juntos, me encanta que me coja de la mano y me haga sentir que apretándola fuerte jamás me voy a estrellar.

Tampoco puedo dejar de pensar en cuando lo veo durmiendo. Hace tiempo que me desperté y pensé que era lo que quería ver el resto de mi vida al levantarme todos los días.

Podría tardar años en enumerar las razones por las qué me enamoré de él y por las que cada día me hace feliz. Hazme caso amiga, es maravilloso sentir como suben esas mariposas por el estómago cada vez que se te acerca al oído y te susurra Te quiero”.

lunes, 12 de marzo de 2012

Mentiras piadosas

Que lo de la reforma laboral no beneficia al empresario es una mentira piadosa. Demostrado queda. Reforma aprobada y varias empresas aprovechan para despedir a sus trabajadores alegando el ya famoso “abandono del puesto de trabajo”. Durante el fin de semana se han podido escuchar infinidad de casos. Gente que se encontraba de baja o con días de permiso por la muerte de un familiar y han sido despedidos sin que se cometa una ilegalidad, la reforma laboral hace que la ley lo avale.

Ese es uno de varios casos que ya han tenido lugar desde que se aprobara la reforma. ¿Todavía existen dudas? La reforma laboral no favorece al trabajador. Tampoco crea empleo. Lo único para lo que sirve es para seguir engordando a los que están hinchados de poder. ¡Qué hagan lo que quieran!, ¡Tienen el camino allanado!

El despido improcedente se reduce de 45 días a 33 días por año trabajado y un máximo de 24 mensualidades. De esta forma, será el trabajador despedido el que tenga que demostrar que su despido ha sido improcedente. En cuanto al despido procedente se mantiene la indemnización en 20 días por año trabajado con un máximo de 12 mensualidades, pero se facilita el despido por causas económicas, sin necesidad que la empresa tenga pérdidas. En los casos de Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) se elimina la autorización administrativa previa, ahora sólo será necesaria la autorización judicial.

Respecto a la cuantía salarial se incluye en las condiciones de trabajo que la empresa puede acordar por razones económicas, técnicas, organizativas o de producción. Esto abre la puerta a la bajada de salarios si la empresa alega razones de competitividad. A partir del 1 de enero de 2013 se recupera el límite de dos años para el encadenamiento de contratos temporales, que había sido suspendido hace unos meses con carácter temporal.

Ante tal situación, se plantea el último resquicio para intentar luchar por los derechos de los trabajadores. Una huelga general que se ha convocado para el próximo 29 de marzo con manifestación incluida.

Pero surge otro conflicto. ¿Secundo la huelga o no? Es un derecho que tienen todos los trabajadores y muchos lo harán valer y ese día no irán a trabajar. ¿Las consecuencias? Baja en la seguridad social y un día que no se cobra. Para algunos ciudadanos no es problema, quieren ejercitar su derecho siendo conscientes de las consecuencias. Sin embargo, otros no se encuentran en la situación económica de poder perder un día de trabajo para hacer valer sus derechos.

Ante esta situación también nos encontramos a aquellos para los que perder un día de sueldo no les supone nada, pero que ¡oye, es un dinero, total, no va a servir para nada! Es posible, pero no puede ser como aquel que decide no acudir a votar y luego es el que más se queja. “Primero haga valer sus derechos, que ha costado mucho conseguirlos, luego ya tendrá tiempo para quejarse con argumentos”, le diría yo.

Hay que aprovecharlos. Son pocos y cada vez menos los derechos que tenemos los ciudadanos de a pie, ¡vamos a intentar hacerlos valer! Quizá la huelga general sea también como una pequeña mentira piadosa y no se consiga nada. Eso no podemos saberlo, sólo nos queda intentarlo y seguir intentándolo una y otra vez. En algún momento nos haremos oír, ¿no? Esperemos que se cumpla aquello de: “El que la sigue la consigue”.


http://www.que.es/ultimas-noticias/espana/201203110930-reforma-laboral-gobierno-rajoy-claves-cont.html

miércoles, 7 de marzo de 2012

“Passa la palla”

Como no podía ser de otra manera, para no perder la costumbre, me he vuelto a encontrar con problemas burocráticos. Hace cinco meses que pedí el carnet de la biblioteca que supuestamente tenía que haberme llegado en quince días.

Cansada de esperar decido acercarme y preguntar directamente. El señor funcionario me da una razón muy lógica (véase el tono irónico) de por qué no me ha llegado el carnet: “Se lo habrá quitado alguien de buzón”. Y se queda tan a gusto.

En esas que estoy esperando a que vuelvan a cogerme los datos para volverme a mandar el carnet, esperemos que esta vez sea en quince días, aparecen unos jovenzuelos. Digamos que eran unos ocho.

Uno de ellos, avergonzado, decide tomar la iniciativa y comienza su discurso: “Buenas tardes. Soy socio de esta biblioteca y tengo el carnet (¡qué bien!, pienso yo, a él no se lo han robado del buzón) necesito pasar a la biblioteca para hacer un trabajo en grupo. Estos son mis compañeros y necesitamos utilizar el ordenador.

Ni corto ni perezoso el señor funcionario le responde que no, que son muchos y que no pueden pasar porque van a molestar a las demás personas que quieren estudiar. (Mis ojos como platos cuando vi que la biblioteca estaba totalmente vacía). A lo que añade que ocho personas no se pueden poner en un ordenador, que sería un caos.

Los niños se van. La persona que me atiende masculla entre dientes que esas cosas tienen que hacerlas en el colegio. Pero, ¿qué pasará? Mañana llegarán los niños al colegio, el profesor les pedirá el trabajo un grupo y ellos no tendrán nada que entregar.

El profesor les dejará más días para que puedan entregar el trabajo, pero el grupo de niños sigue sin encontrar un lugar donde sentarse a hacerlo. Desde el colegio los mandan a la biblioteca y de allí al colegio otra vez, o a sus casas, donde sus padres estarán demasiado ocupados como para poner una mesa, ocho sillas y un ordenador.


* El titular es una expresión en italiano que significa: "Pasa la pelota"